La Rosa de Acero - La mácula de los Da Fonte (2/5)
Apenas amanecía sobre la ciudad de Fiumiri cuando los nudillos de un hombre embozado en oscuros ropajes golpearon las puertas de una de las más elegantes casas de la Strada Nord. La criada que abrió la puerta no pudo esconder del todo su gesto disgustado pero, aún así, hizo entrar al hombre. En silencio, Bonaguida siguió a la mujer por los pasillos de servicio hasta llegar al dormitorio de su clienta. Francesca Calandri le recibió en ropa de noche, haciéndole saber su disgusto por el hecho de que se presentase en su casa, lo hiciese sin previo aviso y a aquellas horas. Tras disculparse, Bonaguida le aeguró a Francesca que la información que traía para ella era de lo más importante. No en vano, había sabido que su amado y prometido, Sinibaldo Da Fonte, había caído en las garras de un tal Daniele Acórdolo. Como la dama no conocía al personaje en cuestión, Bonaguida le indicó que se trataba de uno de los señores criminales del Quartiere di Fluggine. Al parecer, todo se debía a un presu